¡Por fin he vuelto! Con amigos y con las actividades del verano pasado, el tiempo pasó volando.
Cenamos con un amigo polaco y preparé Karpatka, un pastel tradicional polaco. ¡Está buenísimo y es facilísimo!
Karpatka
Masa
260 gramos de agua
130 gramos de mantequilla a temperatura ambiente, cortada en trozos
140 gramos de harina
5 huevos
Crema
Natillas
80 g de azúcar
400 g de leche
40 g de maicena
3 huevos
1 cucharada de pasta de vainilla
120 gramos de mantequilla
Crema
2 tazas de crema para batir
Azúcar glas al gusto
1 cucharada de pasta de vainilla
Masa
Hierve el agua y añade la mantequilla. Una vez mezclados, apaga el fuego y añade la harina. Remueve bien para evitar grumos. Deja enfriar durante 1 hora. Cuando esté fría, añade los huevos y mezcla bien. Divide la masa en dos partes. Extiéndela en un molde de 26 cm de diámetro sobre papel vegetal. Hornéala a 230 °C durante 25 minutos o hasta que esté dorado. Déjala enfriar.
Natillas
Mezcla 300 ml de leche, azúcar y pasta de vainilla. Ponla en una olla y cocina a fuego lento. Mezcla los huevos y la maicena con los 100 ml restantes de leche. Añádelo a la leche tibia. Mezcla bien y deja que espese. Reserva y deja enfriar. Cuando las natillas estén frías, añade la mantequilla y mézclala con una batidora de mano. Reserva.
Crema para montar
Con una batidora de mano, bate la crema para montar hasta que esté firme. Añade el azúcar y la pasta de vainilla.
Mezcla la crema pastelera con la crema para montar con movimientos suaves. En una mitad de la masa horneada, coloca el relleno de crema pastelera y encima la otra mitad. Añade un poco de azúcar glas por encima si es necesario. Refrigera durante 2 horas. ¡DISFRUTAR!