La India es uno de los países que realmente me gusta. Tengo que admitir que antes de irme a India, yo no sabía casi nada. Crecí sabiendo acerca de América Latina, América del Norte, Europa, y las pirámides en Egipto. Sin embargo, la India no era parte de los libros de texto.
Nuestro viaje a la India duro alrededor de cinco semanas, y fue fantástico. Cada vez cuando alguien me pregunta lo que más me impresionó, digo que mas alla de su fantástica cocina, cultura, historia y patrimonio, la FELICIDAD que vi en su gente es lo que me sorprendió más. Amigos me preguntan, por lo general, sobre la pobreza o los problemas que he visto en la India. Yo siempre respondo que yo sólo vi FELICIDAD. Caminamos a través de pequeñas aldeas, nos quedamos en zonas remotas, de hecho, no fuimos a los lugares turísticos típicos, y yo todavía puedo afirmar que lo que vi me tocó el alma.
Todavía me acuerdo que pase por un pequeño pueblo cerca de Bodhgaya. El pueblo no tenía más de 20 casas. El conductor que estaba con nosotros se perdió en la zona, y teníamos que preguntar por el camino. Aprovechamos la oportunidad para salir del coche y estirar las piernas, cuando de repente nos vimos rodeado de niños que estaban jugando y cantando alrededor de nosotros..... aparte de sus malas condiciones de vida (desde el punto de vista occidental )..... eran FELICES. Fue un momento surrealista y mágico. No puedo explicar con palabras lo que pasaba en ese momento, pero sin duda, lo que experimenté en ese momento, estará conmigo para siempre.
Es difícil de explicar esa sensación de felicidad cuando todo el mundo sabe las situaciones difíciles que un país en desarrollo como la India se enfrenta todos los días. Pregunto a mis amigos indios si tienen una razón de ser o sólida explicación de lo que pienso acerca de la India. Ellos siempre me dicen que crecieron aprendiendo que deben ser felices con lo que tienen, y no ser infelices por lo que no tienen. Probablemente, es una de las lecciones que debemos aprender ......
India abrió mi mente y mi corazón para conocer y amar a una cultura, tradición y herencia que es tan diferente a la mía. Además, en la India experimente algunos de mis momentos más espirituales. No tengo palabras para describirlos, y no creo que usted quiere saber sobre ellos. No obstante, después de haber visitado los lugares donde Mahatma Gandhi fue incinerado (Raj Ghat, Nueva Delhi), y la tumba de Madre Teresa (Misioneros de la Caridad de Calcuta) me sentí bendecida.......
Gracias a mis amigos Indios que me han guiado en una mejor comprensión de su hermosa cultura y me han enseñado a cocinar. Pero, ante todo, debo dar gracias a mi marido que me presentó a la India y me llevo en uno de los paseos más hermosos de toda mi vida.....
Nuestro viaje a la India duro alrededor de cinco semanas, y fue fantástico. Cada vez cuando alguien me pregunta lo que más me impresionó, digo que mas alla de su fantástica cocina, cultura, historia y patrimonio, la FELICIDAD que vi en su gente es lo que me sorprendió más. Amigos me preguntan, por lo general, sobre la pobreza o los problemas que he visto en la India. Yo siempre respondo que yo sólo vi FELICIDAD. Caminamos a través de pequeñas aldeas, nos quedamos en zonas remotas, de hecho, no fuimos a los lugares turísticos típicos, y yo todavía puedo afirmar que lo que vi me tocó el alma.
Todavía me acuerdo que pase por un pequeño pueblo cerca de Bodhgaya. El pueblo no tenía más de 20 casas. El conductor que estaba con nosotros se perdió en la zona, y teníamos que preguntar por el camino. Aprovechamos la oportunidad para salir del coche y estirar las piernas, cuando de repente nos vimos rodeado de niños que estaban jugando y cantando alrededor de nosotros..... aparte de sus malas condiciones de vida (desde el punto de vista occidental )..... eran FELICES. Fue un momento surrealista y mágico. No puedo explicar con palabras lo que pasaba en ese momento, pero sin duda, lo que experimenté en ese momento, estará conmigo para siempre.
Es difícil de explicar esa sensación de felicidad cuando todo el mundo sabe las situaciones difíciles que un país en desarrollo como la India se enfrenta todos los días. Pregunto a mis amigos indios si tienen una razón de ser o sólida explicación de lo que pienso acerca de la India. Ellos siempre me dicen que crecieron aprendiendo que deben ser felices con lo que tienen, y no ser infelices por lo que no tienen. Probablemente, es una de las lecciones que debemos aprender ......
India abrió mi mente y mi corazón para conocer y amar a una cultura, tradición y herencia que es tan diferente a la mía. Además, en la India experimente algunos de mis momentos más espirituales. No tengo palabras para describirlos, y no creo que usted quiere saber sobre ellos. No obstante, después de haber visitado los lugares donde Mahatma Gandhi fue incinerado (Raj Ghat, Nueva Delhi), y la tumba de Madre Teresa (Misioneros de la Caridad de Calcuta) me sentí bendecida.......
Gracias a mis amigos Indios que me han guiado en una mejor comprensión de su hermosa cultura y me han enseñado a cocinar. Pero, ante todo, debo dar gracias a mi marido que me presentó a la India y me llevo en uno de los paseos más hermosos de toda mi vida.....